Nació
el sábado 1Na5
de abril
de
1452.
El nombre del artista fue «Leonardo di ser Piero Da Vinci», cuyo
significado es «Leonardo, hijo del maestro Piero De Vinci»;
El
joven Leonardo era un amante de la naturaleza,
la cual observaba con gran curiosidad y le interesaba. Dibujaba
caricaturas
y
practicaba la escritura
especular en
dialecto
toscano.
A
partir de 1469, Leonardo entró como aprendiz a uno de los talleres
de arte más prestigiosos bajo el magisterio de Andrea del
Verrocchio, a quien debe parte de su excelente formación
multidisciplinaria, en la que se aproxima a otros artistas como
Sandro
Botticelli,
Perugino
y
Domenico
Ghirlandaio.
Después
de un año dedicado a la limpieza de los pinceles y otras pequeñas
actividades propias de un aprendiz, Verrocchio inició a Leonardo en
las numerosas técnicas que se practicaban en un taller tradicional.
Así, en este contexto, Leonardo tuvo la oportunidad de aprender las
bases de la química,
de la metalurgia,
del trabajo del cuero
y
del yeso,
de la mecánica
y
de la carpintería,
así como de diversas técnicas artísticas como el dibujo,
la pintura
y
la escultura
sobre
mármol
y
bronce.18
19
Igualmente,
recibió formación en habilidades como la preparación de los
colores, el grabado y la pintura de los frescos. Al darse cuenta del
talento excepcional que tenía Leonardo, Verrocchio decidió
confiarle a su alumno terminar algunos de sus trabajos.
Pronto
Leonardo también destacó como ingeniero.
En1478,
se ofreció para levantar la iglesia octagonal de San Juan de
Florencia.11En
ese año Leonardo contaba con 26 años, y fue cuando se alejó de
lado de su maestro después de haberlo superado brillantemente en
todas las disciplinas. De esta manera se convirtió en un maestro
pintor independiente.
Leonardo
pintó La
Virgen de las Rocas
Hacia
1490
creó
una academia que llevaba su nombre, en la que durante unos años
enseñó sus conocimientos, anotando todas sus investigaciones en
pequeños tratados. Pintó el fresco de laLa
última cena(1494-1498)
para el convento dominico de Santa
Maria delle Grazie.12
En
1496 llegó a Milán Luca
Pacioli y
estableció una gran amistad con Leonardo, que realizó para él las
tablas que se grabaron en su obra La
Divina proportione.11
Un
poco más tarde, en 1498,
construyó el techo del castillo de los Sforza.23
En
1499
las
tropas de Luis
XII de Francia conquistaron
el Ducado
de Milán destituyendo
a Ludovico Sforza, que huyó a Alemania
con
su sobrino Maximiliano
I.28
El
6 de octubre entró en la ciudad Luis XII y reivindicó sus derechos
a la sucesión de los Visconti.28Leonardo
se encontró una mañana con que los franceses estaban usando su
modelo de arcilla a escala real del caballo de la estatua ecuestre de
Francisco Sforza como blanco para sus entrenamientos de tiro,
quedando totalmente destruida.29
Luis
XII consideró la posibilidad de cortar el muro donde se encontrab
La
última cena para
llevársela a Francia, como también lo pensó Napoleón
Bonaparte siglos
más tarde.23
Con
la caída de los Sforza Leonardo quedó al servicio del conde de
Ligny, Luis de Luxemburgo, que le pidió que preparase una relación
sobre el estado de la defensa militar de la Toscana.11
El
14
de diciembre Leonardo
hizo depositar 600 florines en el Hospital
de Santa Maria Nuova de
Florencia, que actuaba como banca. El retorno inesperado de Ludovico
Sforza modificó sus proyectos y huyó de Milán con su asistente
Salai
y
el matemático Luca
Pacioli.

Leonardo
creó La
última cena,
su mejor obra, la más serena y alejada del mundo temporal, durante
esos años caracterizados por los conflictos bélicos, las intrigas,
las preocupaciones y las calamidades. La dio por terminada, aunque
él, eterno insatisfecho, declaró que tendría que seguir trabajando
en ella. Fue expuesta a la vista de todos y contemplada por muchos.
La fama que el «gran caballo»Nota
7 había
hecho surgir se asentó sobre cimientos más sólidos. Desde ese
momento se le consideró sin discusión uno de los primeros maestros
de Italia,
si no el primero. Los artistas acudían desde muy lejos alrefectorio
del convento de Santa Maria delle Grazie,
miraban la pintura con detenimiento, la copiaban y discutían. El rey
de Francia,
al entrar a Milán,
acarició la idea de desprender el fresco de la pared para llevárselo
a su país. Durante su realización se tejieron innumerables leyendas
en torno al maestro y a su obra. Los relatos de Bandello y Giraldi,
dedicados por lo demás a temas radicalmente distintos, recogen
también la génesis de La
Última Cena.
De Venecia a Florencia (1501-1508)
En
marzo de 1499, Leonardo trabajó como arquitecto e ingeniero militar
para los venecianos que querían construir protecciones en su
ciudad.7
12
Por
este motivo, elaboró sistemas para defender la ciudad de un posible
ataque naval de los turcos
y,
entre sus propuestas, destaca la invención de un tipo de escafandra
submarina
con un casco rudimentario. Los turcos no atacaron y el invento nunca
fue utilizado. A finales de abril, volvió a Florencia y allí,
después de hacer un estudio sobre los cursos de agua
en el Friuli,
propuso un sistema de esclusas
para
hacer posible el levantamiento del curso del río
Isonzo y
así poder inundar toda una región que cubría las cercanías de
Venecia.11
Regresó
a Venecia en abril de 1500 para permanecer ahí durante un par de
meses después de haber estado en Mantua
en
compañía del fraile matemático Luca
Pacioli.
En Mantua destacó por un retrato que hizo a Isabel
de Este.
Una carta del 4 de abril de 1501 en la que Pierre de Nuvola responde
a la duquesa de Mantua, en relación a Leonardo afirma que «sus
estudios matemáticos lo han alejado de la pintura»; Leonardo
continuaba llevando a cabo grandes investigaciones.11
En
1501, recibe en el convento de la Santissima Annunziata la aprobación
para hacer un boceto preparatorio de lo que sería La
Virgen y el Niño con santa Ana y san Juan Bautista,
una obra que provocó tal admiración que «hombres y mujeres,
jóvenes y viejos» acudían a observarla «como si estuvieran
participando en un gran festival».14
30
Realizó
una breve estancia en Roma,
en la villa
Adriana,
en Tívoli.28
Estuvo
trabajando en la Virgen
de los husos,
un encargo de Florimond Robertet, el secretario de Estado de Luis
XII de Francia.28
En
1502, fue solicitado por el príncipe César
Borgia,
duque
de Valentinois e
hijo del papa Alejandro
VI,
y obtuvo el cargo de «capitán e ingeniero general».7
Se
quedó en las Marcas
y
en la Emilia-Romaña
para
inspeccionar las fortalezas y los territorios recientemente
conquistados, llenando sus cuadernos de múltiples observaciones,
cartas, croquis de trabajo y copias de obras consultadas en las
bibliotecas de las ciudades que él visitaba.11
Allí
se reencontró con Nicolás
Maquiavelo,
«espía» de Florencia al servicio de los Borgia.
El
18
de octubre de
503,
regresó a Florencia,
donde ejerció las funciones de arquitecto e ingeniero hidráulico.11
Se
volvió a inscribir en el gremio de San Luc y le dedicó dos años
(1503-1505) a la preparación y ejecución de La
batalla de Anghiari,
una pintura mural imponente de siete por diecisiete metros,7
28
mientras
Miguel
Ángel pintaba
La
batalla de Cascina en
la pared opuesta.28 Las
dos obras se han perdido. La obra de Miguel Ángel se ha conocido a
partir de una copia de Aristotole
da Sangallo de 1542,31 y
la pintura de Leonardo la conocemos a partir de croquis preparatorios
y de varias copias de la sección central, de las cuales sin duda la
más destacada es la de Rubens.7 Parece
ser que las causas de la alteración de la obra fueron el fuego que
se utilizó para secar más rápidamente la pintura o la calidad del
material usado; posteriormente fue recubierta, probablemente por un
fresco de Giorgio Vasari.28
A
menudo, se consultaba a Leonardo como experto, como, por ejemplo,
para estudiar la estabilidad del campanario de San
Miniato al Monte y
en el momento de la elección del emplazamiento del David de
Miguel Ángel,28 sobre
lo cual su opinión se oponía a la de éste. Fue en este período
cuando presentó a la ciudad de Florencia su
proyecto de desviación del río
Arno,
destinado, por una parte, a crear una vía navegable capaz de
conectar a Florencia con el mar y, por otra, a permitir el control de
las terribles inundaciones.11 Este
período fue importante para la formación científica de Leonardo.

De Milán a Roma
La
Monalisa es
el retrato que más literatura ha generado a lo largo de toda
la historia
del arte;
ha dado origen a cuentos, novelas, poemas y
hastaóperas.
Fue una obra famosa desde el momento de su creación; el joven Rafael
bebió en ella. Su sonrisa ha hecho correr ríos de tinta. Se ha
visto en ella crueldad y se le ha considerado la sonrisa despiadada
de la mujer que esclaviza al hombre. Otros se han sentido
deslumbrados por su encanto, por su dulzura. Para Walter Pater
simboliza el «espíritu moderno con todos sus rasgos
patógenos».11 Existe
también una explicación más prosaica, fundada en las propias
anotaciones de Leonardo: el maestro hizo aflorar esa expresión a su
modelo con el tañido del laúd.28 Citemos
a Vasari: «Monalisa era muy bella y Leonardo, mientras pintaba,
procuraba que siempre hubiese alguien cantando, tocando algún
instrumento o bromeando. De esta manera, la modelo se mantenía de
buen humor y no adoptaba un aspecto triste, fatigado [...]».14
En 1504,
volvió a trabajar en Milán,
que, en aquella época, se encontraba bajo el control de Maximiliano
Sforza gracias
al apoyo de los mercenarios suizos.
Muchos de los alumnos y los interesados en la pintura conocieron o
trabajaron con Leonardo en Milán; entre ellos, cabe destacar
a Bernardino
Luini, Giovanni
Antonio Boltraffio y Marco
d'Oggiono.Nota
8 Su
padre murió el 9
de julio y
Leonardo fue apartado de la herencia debido a su ilegitimidad; sin
embargo, más tarde su tío haría de él su heredero universal.28 El
mismo año, Leonardo realizó estudios anatómicos e intentó
clasificar sus innumerables notas. También es la época en que
empieza a trabajar en La
Gioconda (1503-1506,
y después 1510-1515)
obra habitualmente considerada como un retrato de Lisa
Gherardini o,
por el nombre de casada, Monna
Lisa del Giocondo.
Sin embargo, hay numerosas interpretaciones sobre este cuadro que aún
son motivo de debate y discusión.
En
1505, se dedicó a estudiar el vuelo de los pájaros, y es también
cuando redacta elCódice
sobre el vuelo de los pájaros.32 A
partir de entonces, observaciones, experiencias y reconstrucciones se
sucedieron con mucha intensidad.11 Un
año más tarde, el gobierno de Florencia le permitió reunirse con
el gobernador francés de Milán,Carles
d'Amboise,
que lo retuvo con él pese a las protestas por parte de Florencia.
Leonardo quedó en medio de disputas entre franceses y toscanos,
y fue presionado por el tribunal para que acabara La
Virgen de las rocas con
su alumno Ambrogio
de Predis,
mientras se encontraba trabajando en La
batalla de Anghiari.28
En 1507,
Leonardo quedó como único heredero de su tío Francesco, pero los
hermanos de Leonardo empezaron un procedimiento para modificar el
testamento.28 Leonardo
apeló a Charles d'Amboise y a Florimond Robertet para que
intervinieran en su favor;28Luis
XII regresó a Milán y Leonardo se convirtió de nuevo en el
organizador de las fiestas que se celebraban en la capital lombarda.
En 1508,
vivió con el escultor Giovanni Francesco Rústica en casa de Piero
di Braccio Martelli, en Florencia,33 pero
luego se marchó y se fue a vivir a Milán, en la Porta Orientale, en
la parroquia de Santa Babila.7 Luis
XII volvió pronto a Italia y en mayo de1509 entró
en Milán. Pronto dirigió sus ejércitos contra Venecia y Leonardo
siguió al rey en calidad de ingeniero militar, y asistió a
la batalla
de Agnadel.11 En
1511, murió el gobernador Charles d'Amboise y, en 1512, tras
la batalla
de Rávena,
Francia se marchó del territorio italiano. Este segundo período
milanés le permitió a Leonardo profundizar en sus investigaciones
de ciencia pura. En 1509, la aparición de De
expendentis te fugiendis rebus de Giorgio
Valla tuvo
una gran influencia sobre él.11
En septiembre de 1513,
Leonardo da Vinci se fue a Roma,
donde trabajó para el papaLeón
X,
miembro de la rica y poderosa familia de los Médicis.
En aquellos momentos, en el Vaticano, Rafael y Miguel
Ángel tenían
mucho trabajo.7 Ante
el éxito de Sangallo,
Leonardo no recibió más que encargos modestos y parece que no
participó ni en la construcción de las numerosas fortalezas
romanas, poco relevantes, y ni en el embellecimiento de la capital.
Tampoco tuvo éxito su pintura y se refugió en otra especialidad,
quizá su preferida, la hidráulica,
y realizó un proyecto de secado de las Lagunas
Pontinas,
que pertenecían al duque Juliano
II de Médicis.11 En 1514,
realizó la serie de los Diluvios,
que fue una respuesta parcial a la gran obra que Miguel Ángel
desarrolló en la bóveda
de la Capilla Sixtina.
«Los
Médici me han creado, los Médici me han destruido», escribió
Leonardo, sin duda para subrayar las decepciones de su estancia en
Roma. Pensó que nunca se le dejaría mostrar su capacidad con la
realización de un encargo importante. Probablemente también era
conocida su inestabilidad, su fácil desánimo y su dificultad para
finalizar lo que había empezado
Los últimos años en Francia
En septiembre de 1515,
el nuevo rey
de Francia, Francisco
I,
reconquistó Milán tras
vencer en la batalla
de Marignan.34 En
noviembre del mismo año, Leonardo diseñó un nuevo proyecto sobre
la disposición del barrio de Médici en Florencia. El 19
de diciembre,
estuvo presente en la reunión entre Francisco I y el papa León X
que se celebró en Bolonia.12 35 36 Francisco
I le encargó a Leonardo un león mecánico que pudiera andar y con
el detalle de que el pecho se abriera para mostrar la flor
de lis.14 No
se sabe para qué ocasión fue concebido este león, pero puede tener
relación con la llegada del rey a Lyon,
o con las conversaciones de paz entre el rey y el papa.Nota
9
En 1516 se
marchó a Francia junto con su ayudante, el pintor Francesco
Melzi,
y quizás también con Salai;33 su
nuevo mecenas y protector, el rey de Francia Francisco
I, los instaló en la casa donde éste vivió en su niñez,
el Castillo
de Clos-Lucé,
cerca del castillo de Amboise.
Fue el «primer pintor, primer ingeniero y primer arquitecto del
rey»,10 y
recibió una pensión de 10.000 escudos.7 En
la corte francesa estaban más interesados por el pintor que
por el ingeniero,
lo cual en Italia era lo más valorado.11 El
hecho de que Francisco I le diera el castillo de Clos-Lucé se puede
entender como un mensaje a Leonardo para que «hiciera lo que él
quisiera». No fue el primer artista en recibir este honor,
pues Andrea
Solario y Giovanni
Giocondo lo
habían precedido unos años antes.33 El
rey estaba fascinado con Leonardo y lo consideró como un padre. La
casa y el castillo de Amboise estaban conectados por un paso
subterráneo que permitía al soberano rendir visita al artista y
hombre de ciencia con total discreción. Leonardo proyectó el
palacio real de Romorantin, que Francisco I pretendía erigir para su
madre Luisa de Saboya: sería una pequeña ciudad, para la cual
previó el desvío de un río que la enriqueciera con agua y
fertilizase la campiña vecina. En 1518 participó
en las celebraciones del bautizo del Delfín y de las bodas de
Lorenzo de Médici con una sobrina del rey francés. Ese mismo año
Salai abandonó a Leonardo y retornó a Milán, donde más adelante
(el 19
de enero de 1524)
perecería en un duelo.11
El 23
de abril de 1519,
Leonardo, enfermo desde hacía varios meses, redactó su testamento
ante un notario de
Amboise. Pidió un sacerdote para confesarse y recibir
la extremaunción.14 Murió
el 2
de mayo de 1519,7 11 14 28 33 en
Cloux, a la edad de 67 años.